peliculas en donde el espacio interior es el protagonista
El reciente éxito de Parasitos –una película galardonada del cineasta coreano Bong Joon Ho– puso sobre la mesa la relevancia de la arquitectura y los espacios interiores en la crítica cinematográfica. Como pocas películas pueden hacer, la obra maestra de Ho borró los límites entre los dos campos disciplinarios hasta el punto en que podemos decir, sin exagerar, que la arquitectura no solo está allí como telón de fondo, sino que asume el papel de protagonista en muchas escenas.
Sin embargo, a pesar de hacer esto con una competencia inigualable, Parasitos no es la única película que atribuye gran importancia a los interiores; diversas obras cinematográficas lo han hecho antes con un éxito rotundo. A continuación, presentamos siete películas en las que los espacios interiores juegan un papel fundamental en el discurso cinematográfico.
Parásitos
Ganadora de cuatro premios Oscar, Parasitos reafirma la fuerte relación que existe entre el arte del cine y la arquitectura, sus escenarios se han convertido en el foco de discusión en medios especializados de ambas disciplinas. La opulenta casa familiar de Park –con sus materiales refinados, muebles minimalistas, ambiente austero y gran jardín–, se opone a la imagen sombría de la casa familiar Kim, una guarida parcialmente subterránea con una apariencia erosionada, cuya única ventana se abre al nivel de la calle.
A lo largo de la película, una intrincada red de relaciones entre los personajes destaca los problemas socioeconómicos de Corea y, en general, del capitalismo globalizado, encontrando en la arquitectura un interesante contrapunto metafórico. Aún más significativo, el punto de inflexión de la narración ocurre, precisamente, cuando se revela un nuevo espacio en la casa, una especie de búnker subterráneo.
A lo largo de la película, una intrincada red de relaciones entre los personajes destaca los problemas socioeconómicos de Corea y, en general, del capitalismo globalizado, encontrando en la arquitectura un interesante contrapunto metafórico. Aún más significativo, el punto de inflexión de la narración ocurre, precisamente, cuando se revela un nuevo espacio en la casa, una especie de búnker subterráneo.
Birdman o (la inesperada virtud de la ignorancia)
También ganadora de cuatro premios Oscar, Birdman es una película interior, filmado para que parezca que (casi) toda la película consiste en una secuencia única. La película tiene lugar casi por completo dentro de un teatro, donde la compañía dirigida por Riggan, el protagonista, realiza sus ensayos y presentaciones. Riggan a su vez es un actor –quien en el pasado había tenido éxito interpretando a un superhéroe– que busca a toda costa recuperar el prestigio del público y los críticos, quedando atrapado en un vórtice de confusión mental potenciada por los movimientos de la cámara y los personajes a través de los pasillos. Cada vez más cerca de la locura, los laberintos mentales se confunden y se reflejan en los laberintos del teatro, cuyos espacios se vuelven cada vez más estrechos y claustrofóbicos.
Her
Her tiene lugar en un futuro no muy preciso, en el que el protagonista Theodore Twombly se enamora de Samantha, un sistema de inteligencia artificial personificado por una voz femenina. A diferencia de otras películas de ciencia ficción que se basan en objetos y elementos de diseño para caracterizar el futuro, Her es una película que habla de emociones y atmósferas, y lo hace a través de elecciones precisas, mínimas e incluso banales de los elementos materiales que aparecen en la escena.
El apartamento de Theodore busca reflejar el estado mental del personaje: recientemente divorciado, deprimido, Theodore parece ver ese espacio como un lugar temporal, sin molestarse en desempacar algunas de sus pertenencias. Los colores de la película también contribuyen a crear una atmósfera específica: las superficies, los materiales y la luz misma tienden a tonos rojos y naranjas, creando un ambiente agradable y cálido para el personaje.
El apartamento de Theodore busca reflejar el estado mental del personaje: recientemente divorciado, deprimido, Theodore parece ver ese espacio como un lugar temporal, sin molestarse en desempacar algunas de sus pertenencias. Los colores de la película también contribuyen a crear una atmósfera específica: las superficies, los materiales y la luz misma tienden a tonos rojos y naranjas, creando un ambiente agradable y cálido para el personaje.
El gran hotel Budapest
Las películas de Wes Anderson tienden a complacer los ojos de arquitectos y fotógrafos, mostrando composiciones de planos perfectamente simétricos y espacios que parecen fusionar pasado y presente, realidad y fantasía. El Grand Hotel Budapest no es diferente, y sus exuberantes interiores llenos de texturas y colores saturados contribuyen a darle a la película el aspecto surrealista típico de otras producciones de Anderson.
El resplandor
Al igual que Birdman, los interiores de El resplandor se vuelven cada vez más laberínticos, a medida en que la locura se apodera de la mente del protagonista Jack Torrance. Aislado del mundo en un hotel que permanece cerrado al público durante gran parte del año, la fragilidad mental de Jack lo lleva a ver situaciones imaginarias, personas y espacios, y a querer asesinar a su esposa e hijo, sus únicas compañías en una ubicación remota. El final del protagonista tiene lugar, precisamente, en un laberinto de hiedra, en donde exhausto después de perseguir a su familia, muere congelado en una fría noche de invierno.
Nostalgia
Un poeta ruso, Andrei Gorchakov, y su intérprete viajan a Italia para investigar la vida de un compositor del siglo XVIII. Sin embargo, durante su estancia en el Mediterráneo, la nostalgia de su tierra natal comienza a plagar la mente y las emociones del poeta. Al ritmo lento de la película –también presente en otras producciones de Andrei Tarkovsky–, se hace eco de una arquitectura de superficies erosionadas y deterioradas, gastadas por el tiempo y por el uso de los personajes. No es difícil buscar en la fenomenología una posible interpretación de estos interiores marcados por el uso, que aluden a la nostalgia que siente el personaje de su tierra natal.
Rope
Utilizando el recurso del plano secuencia –con los cortes de la película realizados en momentos estratégicos e "invisibles"–, esta obra maestra de Hitchcock se desarrolla completamente dentro de un ático en Manhattan. En donde, en un departamento, Brandon Shaw y Phillip Morgan matan extrañamente a su compañero de clase de la universidad y luego reciben invitados para la cena. La tensión entre los personajes aumenta a medida que el joven maestro, Rupert Cadell, quien había sido invitado a la fiesta, se preocupa por la ausencia del tercero y, después de una serie de preguntas, termina descubriendo que el cuerpo de la víctima yacía dentro de un gran buffet durante el cual se sirvió la cena.
Galería del Proyecto
Sobre este autor/a
0 comentarios:
Publicar un comentario